Miércoles 27 de Junio , 2007
Humberto Vargas
El artista nacional, ganador del festival chileno Viña del Mar 2006, visit� diferentes poblados nacionales para regalar alegría y esperanza
Contacto. Humberto conversó con un grupo de mujeres minutos después de su concierto en San Vito de Coto Brus. Alberto Zúñiga
Anita, en su cama, con más de 70 años y una enfermedad terminal le mostró, toda coqueta, sus uñas recién pintadas. Luego, cuando Humberto cantó a capella el bolero Tres Regalos se soltó a llorar.
Humberto Vargas, nuestro ganador en Viña del Mar 2006, tomó las manos de Anita y ambos se miraron por unos segundos. Luego vino la separación y despedida.
“Eso en lugar de entristecerme me inyecta de más vida porque Anita, ahí donde la viste llorando, lo hizo de alegría y no por sufrimiento. Eso lo sé muy bien”.
Lo anterior sucedió en un hogar para enfermos terminales en las afueras de San Isidro, Pérez Zeledón. Para su sorpresa en otros lugares hasta coreografía de sus canciones le fueron presentadas, y en Upala los indios Malekú se hincaron a orar por él.
Recuerdos que este cantautor atesora después que se lanzó con su mochila cargada de letras a cantarlas por diversas comunidades donde, desde la capital, a casi nadie le interesa llegar. En total, Humberto estuvo en ocho localidades alejadas de San José.
Gira por la Vida. Humberto, con su habitual sencillez pueblerina, pero revestido de una cierta y sincera personalidad empresarial, emprendió hace cinco meses una jornada de proyección artística por diferentes comunidades del país.
En lugar de quedarse a disfrutar de las mieles del éxito en los bares capitalinos tomó la decisión de llevar sus canciones a otros ámbitos, y una primera evaluación arroja resultados muy positivos para él y sus dos patrocinadores: el grupo Roche y la Importadora Monge.
El día de la presentación del concierto sucedían varias cosas en la comunidad elegida. Por la mañana el grupo Roche impartía charlas sobre la hepatitis a grupos afectados y a interesados en este tema.
Por la tarde, unas cuantas horas antes de la presentación, Humberto hacía acto de presencia en la tienda de Importadora Monge del lugar para firmar autógrafos y posar para fotografías que se entregaban en el mismo momento a sus seguidores.
Esta noche en El Observatorio, ubicado frente al Cine Magaly en el barrio La California de la ciudad de San José, Humberto cierra su primera gira por el interior del país y concluye así un capítulo en su trayectoria artística que, como él mismo lo manifestó, no sabe dónde lo llevará en el siguiente paso. Lo que si tiene bien claro es que habrá un siguiente paso, y otro, y otro y otro más.
A pocas horas de cerrar el ciclo de giras Viva conversó con él.
¿Qué le quedó a Humberto Vargas de esta experiencia?
El que haya ganado Viña del Mar no significa, en absoluto, que la gente conozca mis canciones y tenía dos opciones: quedarme en lo de siempre o salir a buscar un nuevo público. Esta gira por el interior del país me ha servido para decir gracias al país que me ha dado todo y fue la manera en que pude acercarme, a otros, con mis propias canciones.
¿Qué siente que cambió esta gira por el interior del país en su propio interior?
Mi percepción de público lejano y llegué a la conclusión de que no existe. La gente está dispuesta a aceptar una nueva propuesta y el país, en general, evidencia esa necesidad. Cambió mi percepción del país y del público.
Humberto, usted partió de cero en experiencia logística y me pareció verlo metido en todo…
Yo no tenía ni la menor idea de cómo se organiza una gira. Fui el encargado de coordinar todo; es decir, fui gerente del proyecto, productor, cantante y relacionista publico. Me gustó invitar a los artistas de cada región para que abrieran mis conciertos y que la gente se involucrara en su organización. Yo podría haber hecho los conciertos gratis pues ya estaba cubierto por los patrocinadores, pero quise dejar algo en cada comunidad. Por eso, la taquilla se quedó en el lugar para ayudar a alguna institución o programa social.
Concierto en chepe
• “Gira por la vida” en El Observatorio
Día: hoy miércoles 27 de junio
Hora: 9 p. m.
Entrada: ¢2.500
